Translate

dimarts, 28 de juliol del 2015

Echa las redes

Desde que Tú te fuiste
no hemos pescado nada.
Llevamos veinte siglos 
echando inútilmente
las redes de la vida,
y entre sus mallas 
sólo pescamos el vacío.
Vamos quemando horas 
y el alma sigue seca.
Nos hemos vuelto estériles
lo mismo que una tierra 
cubierta de cemento.
¿Estaremos ya muertos? 
¿Desde hace cuántos años no nos hemos reído?
¿Quién recuerda la última vez que amamos?

Y una tarde Tú vuelves y nos dices: 
«Echa la red a tu derecha, 
atrévete de nuevo a confiar,
abre tu alma, 
saca del viejo cofre
las nuevas ilusiones,
dale cuerda al corazón,
levántate y camina».
Y lo hacemos sólo por darte gusto.
Y, de repente, nuestras redes rebosan alegría,
nos resucita el gozo
y es tanto el peso de amor 
que recogemos
que la red se nos rompe cargada
de ciento cincuenta esperanzas.
¡Ah, Tú, fecundador de almas: llégate a nuestra orilla,
camina sobre el agua 
de nuestra indiferencia,
devuélvenos, Señor, a tu alegría 
José Luis Martín Descalzo

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada